Las autoridades de Rusia elevaron esta mañana a 38 la cifra de los fallecidos por el derrumbe parcial de un edificio de viviendas en la ciudad de Magnitogorsk, en los Urales, ocurrido el pasado 31 de diciembre.

"Ha sido recuperado (entre los escombros del edificio) el cuerpo de otra víctima, una mujer", dijo un portavoz del Ministerio de Situaciones de Emergencias de Rusia a la agencia Interfax.

La fuente precisó que la recuperación del nuevo cuerpo sitúa en 38 el número total de los fallecidos por el derrumbe, entre ellos seis niños.

De momento se desconoce la suerte de otras tres personas que residían en la sección del edificio de apartamentos de diez plantas que se desplomó presuntamente por una explosión de gas. 

La tragedia, que ocurrió a las 06.00 hora local (01:00 GMT) del lunes, afectó, según datos preliminares, a los inquilinos de 48 viviendas del edificio situado en la calle Karl Marx.

Cientos de personas han sido movilizadas para las labores de rescate, incluidos especialistas procedentes de Moscú y de Yekaterimburgo, la capital de los Urales, equipados con perros rastreadores. 

Las autoridades han advertido de que debido a las bajas temperaturas, del orden de los 20 grados bajo cero, las posibilidades de hallar sobrevivientes bajo los escombros se reduce con cada hora que pasa. 

El presidente ruso, Vladímir Putin, se personó el lunes en el lugar del siniestro, acudió a los hospitales donde fueron ingresados los heridos e impartió instrucciones de prestar todo tipo de ayuda a los damnificados.

EFE